Congreso en la CDMX recibe de la diputada Gaby Salido propuesta de modificación a la ley del Régimen Patrimonial y del Servicio Público que busca armonizar con lo establecido ya en la Ley de Movilidad de la Ciudad de México, y busca establecer que las empresas encargadas de los parquímetros destinen un porcentaje de los espacios de estacionamiento, no residuales, a motocicletas, bicicletas y vehículos eléctricos o de baja huella ecológica.
“Si bien actualmente se encuentran marcados o delimitados para este tipo de vehículos algunos espacios, lo cierto es que en la práctica son escasos y por lo regular los mismos son colocados en los espacios residuales o sobrantes de las calles y vialidades, es decir, donde no cabe otro tipo de vehículo, para no afectar el ingreso de los parquímetros”, precisó Salido Magos.
Cabe destacar, que ante la denominada Jornada Nacional de “Sana Distancia”, se restringió la circulación en la vía pública y la permanencia de personas en espacios públicos con excepción de aquellas que desempeñaban actividades consideradas prioritarias.
Determinación que obligó a que se presentara cierta saturación de vehículos automotores de dos ruedas alrededor de centros de reparto como supermercados, mercados, farmacias, entre otros.
“Lo anterior nos lleva forzosamente a replantear el destino de los espacios de estacionamiento provisional de vehículos en el espacio público de manera ordenada, a fin de evitar saturación en lugares prohibidos de estacionamiento, tanto de motocicletas y bicicletas, o bien que los mismos permanezcan en doble fila o estorbando incluso pasos peatonales.”
Es en este orden de ideas, es que se hace necesario realizar las actualizaciones y homologaciones de las leyes en la materia, incluyendo a las concesiones de los sistemas de control y supervisión de estacionamiento de vehículos en la vía pública, mejor conocidos como parquímetros.
De acuerdo a los objetivos de la Agenda 2030, una ciudad sustentable y sostenible, es aquella que perdigue el bienestar y beneficio de quienes la habitan y la transitan, al mismo tiempo que busca reducir el impacto y la huella ecológica que se deja al medio ambiente.
Es por ello que estudios a nivel internacional que demuestran que una ciudad con una adecuada política de movilidad, se mide por el número de sus habitantes que prefieren utilizar el transporte público a medios privados como el automóvil.
“Los invito a reflexionar respecto de los avances que hemos tenido en materia de los objetivos de la agenda 2030 y, derivado de esa reflexión, demos pasos firmes en la búsqueda de que nuestra ciudad realmente avance en el sentido correcto, para disminuir el impacto que estamos causando al medio ambiente, y al destinar más espacios de estacionamiento en la vía pública cuyo uso exclusivo sea para vehículos amigables con el medio ambiente, obligando a que la transición para desincentivar el uso del vehículo automotor tradicional, avance favorablemente, hasta lograr que en la ciudad se priorice por el uso de este tipo de tecnologías”, concluyó.